miércoles, 22 de agosto de 2012

Ha llegado el día

Y dentro de 24 horas estaré en BUDAPEST. Increíble pero cierto. Después de taaaanto tiempo esperando este momento.

Aunque no lo creáis he conseguido un poco el orden de todo esto:

(Imagen real de mi cuarto ayer)

Ya está todo listo, maletas, 8742895486546 millones de despedidas, billetes impresos, la maldita tarjeta del banco (que ya me indignaré en otra entrada de lo hijos de puta taaan grandes que son), algo de dinero húngaro, papeleo previo, ¡muchas cosas en muy poco tiempo!


(Parecen muchos florines, pero no os engañéis porque no es ná)

Por supuesto, en cuanto tenga un lugar (espero que precioso jaja) donde vivir en Budapest y conexión a internet, seguiré contando cosas en el blog, porque me espera un viaje en tren (pero esta vez no voy borracha, ohhh) y un viaje en avión, y taxi hasta el hostal, y el hostal, y.. y... y muchas cosas que criticar comentar.

Y así empieza mi erasmus.


sábado, 18 de agosto de 2012

Belleza clásica húngara

Pues buscando cosas de Budapest (cosas desde mercadillos de antigüedades hasta playas de mentirijilla) he encontrado a las que fueron las Ritas Hayworth de Hungría:

Zita Perczel


Klári Tolnay


Katalin Karády



¿Qué os parecen? Unas bellezas de su época, desde luego.

jueves, 9 de agosto de 2012

¿Por qué me tengo que sentir discriminada?

¿Por qué me tengo que sentir marginada (porque es como me siento) porque mi padre no tenga trabajo? 

Siguiendo con papeles que hacer antes de erasmus, el martes fui al Instituto Nacional de Seguridad Social para pedir la tarjeta sanitaria europea, porque claro, me voy 10 meses, y aunque no tenga por qué pasarme nada, pues no sería extraño que haya alguna caída cuando esté la ciudad nevada que acabe en escayola (aunque tocaré madera).



Pues bien, después de esperar mil años de cola, de que me atendiesen y me dijesen que me faltan papeles, de volver a mi casa y rellenarlos, buscar a mi padre para que los firme, y volver al puñetero Instituto de la puñetera Seguridad Social, me dicen que como mi padre no tiene trabajo yo no tengo derecho a la tarjeta sanitaria europea, así que me dan un puto papel en español, que encima como máximo dura tres meses. Osea, que después de esos tres meses mi pobre padre tiene que ir otra vez (y cada tres meses, vaya), tragarse las chorrocientas horas de cola, renovar el papelito y mandármelo a Budapest. MUY BIEN, CAMPEONES.

¿Qué coño pasa? ¿Qué como mi padre no trabaja yo no tengo derecho a qué me atiendan igual que el hijo de un trabajador si viajo al extranjero? En serio, ¿qué culpa tengo yo de nada? ¿Soy menos persona? Es que no lo entiendo. ¿Y qué quieren conseguir con esto? ¿Que mi padre pierda su tiempo?  ¿Qué cuando mi padre renueve el puto papel y me lo envíe se pierda por el camino y tenga que volver? ¿Qué se me caduque el papel y justo entonces tenga que ir al médico (con lo que supone ir al médico sin seguridad social, es decir, PAGANDO todo lo que sea que me tuvieran que hacer)? 

Creo que no costaría tanto hacer una excepción al menos con la gente que se va bastante tiempo fuera (como por ejemplo el erasmus) y darnos la tarjeta. Pero claro, no vaya a ser que de verdad ricos y pobres vayan a estar al mismo nivel, y de eso nada. Si ninguno de mis padres trabaja, pues a joderse y no salir de España (que después de la nueva norma de que si estás en el paro no puedes salir de España, no me extrañaría que esto se haga verdad algún día).

La única conclusión que saco de esto es que son todos unos HIJOS DE PUTA y les deseo a todos lo peor. CABRONES.

PD. Podían aprender un poquito estos mamones que nos gobiernan, al menos alguien si cree que tengo los mismos derechos que los hijos de los trabajadores.