sábado, 19 de junio de 2010

Reflexiones de una tarde de informes de termodinámica

Un estudiante de Física de primer curso diría, sin más, que la velocidad de caída de una piedra está dada por v=(2gh)^1/2. Cuando acaba el último curso sabe que en este fenómeno interviene, además de la gravedad (que no es realmente constante), la aceleración de Coriolis, el rozamiento con el aire y el empuje hidróstatico de este fluido. Sabe también que, en general, la piedra originará turbulencias que la harán girar. Además la piedra se calentará por rozamiento, por lo que cabría hacer un estudio de no sólo de la conducción del calor, de las convecciones que se originan y de la pérdida de energía por radiación, sino también de la pérdida de masa por evaporación. Necesitaría hacer uso, pues, de sus conocimientos de Termodinámica, de la Física del estado sólido y de la Mecánica estadística cuántica, pero no referidas al equilibrio sino a la situación real esencialmente irreversible -y en la formulación relativista para mayor precisión-. Este estudiante reconocerá además que el rozamiento produce una ionización en la superficie de la piedra, por lo que será afectada por los campos electromagnéticos, etc, etc. Si a través de sus estudios el estudiante "se ha hecho físico", concluirá que, a pesar de todo, la velocidad de caída libre de una piedra está dada por v= (2gh)^1/2.

Jesús Biel Gayé

1 comentario:

¡Ladra!